lunes, 11 de noviembre de 2019

DINOSAURIOS Y METEORITOS


Hola Mundo.

Se confirma. Los murcianos somos dinosaurios y hemos votado al meteorito. Fin de la cita. 


PROGRAMA ELECTORAL DE VOX


52 escaños ha logrado el partido que rechaza las autonomías pero ingresa miles de euros gracias a ellas, quiere derogar la Ley de Violencia de Género y la de Memoria Histórica, amenaza con levantar un muro en Ceuta y Melilla, pretende sacar a España de la Unión Europea, veta a la prensa que destapa sus vergüenzas y corruptelas, plantea desmantelar el sistema público de pensiones, desea privatizar la sanidad y la educación, admite que con ellos solo podrán abortar en España las mujeres con dinero y niega el cambio climático.

Casi 200.000 murcianos, muchos de ellos trabajadores y pensionistas pobres que apenas llegan a fin de mes, han comprado la única propuesta electoral de VOX y es que "hay que terminar con la dictadura progre" aunque no sepan muy bien de qué se trata.  A muchos les basta con saber que los de VOX van contra los maricones, las feministas y los moros que destruyen la patria. Y que suene bien fuerte el  ¡Viva España! de Manolo Escobar, como si pudiésemos comer banderas. "Restablecer el orden social en España" gritan los de Abascal que no es otro que el orden de la sotana y el confesionario. La involución. El discurso visceral, primario e irracional.


Y no, no es casualidad que Murcia haya sido la única región de España donde ha ganado VOX. Somos de los más terruños, atrasados, beatos e incultos de España. Ahí están los incuestionables índices estadísticos. A la cola de la cola. El sur español en todo su esplendor tan diferente del norte. VOX ha sido la primera fuerza política en la región de Murcia con el 28% de los votos. Ha ganado incluso en feudos tradicionalmente socialistas. Una victoria tan histórica como vergonzosa.  "Una desgracia alimentada por PP y Cs" como ha dicho el dirigente socialista, Diego Conesa. Y aderezada por la patronal CROEM cuyo presidente, José María Albarracín dice que VOX es un partido constitucionalista que habla sin miedo. En su línea. Nadie esperaba menos de quien defiende el incumplimiento de la legalidad vigente por parte de la UCAM cuyo líder supremo, sin duda, también rezó por VOX.

#MurciaQuéFachaEres es el hastag de moda en redes sociales. Pero me niego a creer que los murcianos son mayoritariamente racistas, xenofobos y  machistas y que la catástrofe ambiental del Mar Menor les importa un pimiento. O quizá sí. Porque los murcianos han votado mayoritariamente al partido político que bajo ningún concepto moverá un dedo en contra del sector agrario que ha nitrificado el Mar Menor echando mierda a capazos durante décadas con el visto bueno del PP. Qué muera el Mar Menor antes de tocar un solo pelo a los agricultores y ganaderos del campo de Cartagena que, dados los resultados, han votado masivamente al partido de Abascal. Un partido que no ha planteado ni una sola propuesta seria para recuperar la laguna porque no la tienen. Todavía son capaces de decir que el Mar Menor lo han contaminado "los progres" y les creerán. Ya dijo el diputado de VOX, Juan José Liarte que el Mar Menor lo han contaminado los españoles de clase media que compraron casa en la playa para que sus hijos veraneasen como los hijos de los ricos y presionan al sector productivo porque quieren comer alcachofas en verano. VOX se alimenta de mentiras y muchos murcianos, como ovejas mansas, les aclaman mayoritariamente. Han dado la victoria al único partido que no acudió a la manifestación en defensa del Mar Menor.

Los sesudos analistas creen que el voto a VOX en la región de Murcia no es estructural, que es coyuntural. Que los murcianos han votado en clave nacional. Que si mañana hubiese elecciones autonómicas para nada cosecharía VOX tan buenos resultados. Se resisten a creer que pueda haber tanta gente de extrema derecha en la región de Murcia. Y puede que tengan razón. O no. De lo que no hay ninguna duda es de que existe una inmensa mayoría de personas descontentas con una clase dirigente inmadura, incompetente, acomodada, falaz, paniaguada e interesada que gestiona a golpe de tuit y no resuelve los principales problemas de la región de Murcia. Las carencias se enquistan. Su  victimismo agota. La frustración ahoga.  Y eso ha llevado a muchos votantes a echarse en brazos de VOX aunque pretendan desmantelar la protección de derechos básicos. La confusión lleva al lado oscuro. Los mismos que en abril volcaron su indignación votando masivamente a Cs, ahora han votado a VOX sin percatarse de que cuando la extrema derecha abre sus fauces siempre hace muerde con intención de hacer daño e intentará morder al Tribunal Constitucional y al mismo Consejo General del Poder Judicial.

Muchos murcianos han comprando sin rechistar unos mensajes electorales que sacuden las vísceras. Nada de ideas elaboradas y complejas que nadie procesa porque razonar cansa. VOX se aprovecha de la incultura de la gente y del esfuerzo que supone pensar y votar de forma racional, analítica y responsable. Los datos objetivos ya no desmontan pensamientos y lo saben. Los de VOX seguirán mintiendo y embarrando el escenario político envueltos en la bandera de España aunque eso suponga colapsar el Tribunal Constitucional con todas las leyes que aseguran que van a recurrir porque dicen que matan la libertad. La Ley LGTBI de la región de Murcia de 2016 es una de las leyes que pretenden recurrir. Y, por supuesto, seguirán aprovechándose de la debilidad del PP en la región de Murcia porque López Miras es de todo menos un líder fuerte. En Galicia, Nuñez Feijoó sí ha aguantado el empuje de VOX. Por cierto, Fernando López Miras, que encadena tres derrotas electorales consecutivas, será recordado como el presidente que nunca ganó unas elecciones y Teodoro García Egea como el primer secretario general del PP derrotado en su tierra por VOX.  Ni Fernando ni Teodoro  terminan de captar que los murcianos, de forma mayoritaria, no confían en ellos y que muchos de los votantes que han emigrado a VOX nunca volverán al PP.

 
Cs, huérfano de padre, busca su sitio en el espectro político tras un batacazo descomunal. Su revoltijo ideológico ha resultado francamente indigesto. Villegas y Hervías también deberían  haber dimitido. Si no cambia de estrategia acabará desapareciendo en la región de Murcia. Ya tienen cara de zombie. La moción de censura del PSRM-PSOE les va a ofrecer una oportunidad única para  cambiar de rumbo y marcar distancias con VOX que ya ha sobrepasado al PP en la región de Murcia y en varias provincias de Analucía donde el gobierno depende de ellos. El problema es que no todos los diputados de Cs están por la labor de desalojar al PP de San Esteban. Valle Miguelez y Ana Martínez Vidal son muy peperas. Cuánto más apriete VOX, más fácil lo tendrá Cs cuyos representantes en la región llegaron a plantearse seriamente salir del gobierno regional tras la mortandad de peces en el Mar Menor. No querían ser cómplices del desastre ambiental, pero lo son. El gobierno del que forman parte sigue sin tomar medidas. Se está limitando a maquillar al muerto a golpe de talonario.

Los Nietos del Mar Menor. Foto publicada por @fonsipoder
"Yo con que quiten las autonomías y expulsen a todos los inmigrantes me conformo" comentaba una señora  en la cola del supermercado mientras rebuscaba céntimos en el monedero para pagar el pan. Ahí tienen dos motivos por los que miles de murcianos han votado mayoritariamente a VOX. Y ni pueden suprimir las autonomías que consagra la Constitución Española ni pueden deportar a todos los inmigrantes. Incultura política y desinformación en una de las veinte regiones más pobres de Europa y con las tasas más altas de fracaso escolar. Una región, la murciana, eminentemente agrícola donde unos pocos se hacen ricos explotando a los mismos inmigrantes a los que VOX quiere deportar. Una región de camareros mal pagados donde los jóvenes realmente cualificados se ven obligados a emigrar lejos de su tierra porque en la Región de Murcia no hay futuro. Se confirma. Los murcianos somos dinosaurios y hemos votado al meteorito.  La mancha verde de la intolerancia, el racismo, la xenofobia y el machismo ya señala  la Región de Murcia en el mapa. Una desgracia más.