DIGO DIEGO

Hola Mundo.

A veces son una auténtica incógnita los motivos que llevan a los políticos a borrar los 'tuits'.  Inexactitudes, faltas de ortografía, salidas de tono, chistes inadecuados, conversaciones frívolas, difusión de bulos... Hay de todo.  Y la mayor parte de las veces, la eliminación de un "tuit" pasa sin pena ni gloria, a menos que sea polémico y exista la conveniente captura de pantalla. 

En España ya existen herramientas para recuperar los tuits que eliminan los diputados españoles. Se llama DigoDiego y es una herramienta auspiciada por la Fundación Civio  cuyo objetivo es "poner de relieve informaciones, opiniones, rasgos personales o conductas relativas a su presencia en redes sociales que, de otra forma, pasarían inadvertidas", explican sus responsables.  

El último tuit más sonado borrado ha sido el del portavoz de Unidos-Podemos en el Senado, Ramón Espinar comiendo en Galicia una "baratísima" mariscada a base navajas, zamburriñas, almejas y pescado con la frase "Galicia libre. Poder popular". Las redes sociales, que no tienen piedad, se le han echado encima con todo tipo de memes e insultos y Espinar, que no es la primera vez que mete la pata por un comentario inadecuado, ha borrado el tuit para apaciguar a la opinión pública como si los de izquierdas estuviesen obligados a comer solamente chopped y mortadela. Que coma lo que quiera y gaste su sueldo como desee, pero que no lo cuente. Ni él ni nadie porque a nadie debería importarle lo que otro está a punto de zamparse. Creo que lo peor del tuit borrado ha sido asociar poder popular con marisco.

Pero vivimos una época en la que sentimos el deseo irrefrenable de compartirlo todo. Así nos va. Y no es menos cierto que las redes sociales se han convertido en un nuevo campo de batalla entre los partidos políticos lo que ha provocado que los medios de comunicación monitorizen determinadas cuentas. 

En Murcia, por ejemplo, hemos podido seguir a través de twitter todas las procesiones a las que han llevado a Fernando López Miras intentando construirle a marchas forzadas una imagen de presidenciable. Con el Cirsto del Rescate, con los Salzillos y con el Cristo Resucitado de Cartagena le hemos visto desfilar. Con 33 años y viviendo en casa de sus padres por comodidad aunque dispone de posibles, el PP en la región de Murcia es consciente de que tiene mucho trabajo por delante y apenas tiempo porque 2019 está a la vuelta de la esquina y los sondeos electorales no pintan bien. Toda ayuda es importante y si es divina más. A López Miras -FER- ya le han dicho que omita eso de que se dejará la pieal por restituir a PAS  y en su presentación como candidato ha asegurado que se siente capaz de agotar la legislatura y que "se dejará la piel por los murcianos". Aprende rápido el zagal, eso es innegable. Y digo zagal porque de sus compañeros solo escucho "es buen crío", "es buen chaval". 

 

Gracias a las redes sociales también sabemos que Podemos ha creado unas plataformas ciudadanas con el nombre "Vamos" que hace un par de semanas protagonizaron un encuentro en Madrid de "empoderamiento ciudadano" -así lo llaman- y que contó con la participación, entre otros, del diputado por Murcia en el Congreso, Javier Sánchez Serna y, por supuesto, de José Martínez Coy que está detrás de la plataforma "Vamos Región de Murcia". No se pierde una. Coy es además uno de los que con engaños impulsó la manifestación contra la corrupción el pasado 5 de marzo -un día antes de que PAS declarase en el juzgado por el caso auditorio- que vendieron como apolítica y apartidista aunque en realidad detrás estaba PODEMOS. Coy y Sánchez Serna son "pablistas" reconocidos que ya preparan el asalto a la dirección regional de PODEMOS porque consideran que Oscar Urralburu no es bastante anticapitalista.

De ese encuentro de empoderamiento asambleario al que se llevaron a Madrid a representantes de las trabajadoras de Ayuda a Domicilio a las que asesora el sindicato SITRAS (con poco éxito hasta la fecha) se publicaron una serie de tuis con una forografía en la que, entre otros, aparecen Pablo Iglesias, Rafa Mayoral, el diputado Sánchez Serna y "el profesor" Antonio Martínez Muñoz que desde hace pocos meses ya no forma parte del comité de garantías de Podemos región de Murcia. Tuits y retuits que a las pocas horas fueron borrados. De esa fotografía no queda ni rastro en la red. Y nada tan aparentemente inocente se borra sin motivo ¿Verdad? Realmente curioso. Como está de moda el denominado periodismo "crowdsourcing" desde que David Fahrenthold ha ganado el Pulitzer 2017, si algún lector conoce el motivo del borrado de ese tuit que no dude en ponerse en contacto con: huevoleaks@gmail.com

Aunque el borrado fotografías o su manipulación no es nueva. En la extinta Unión Soviética era costumbre. Stalin perfeccionó la técnica tras hacerse con el poder del Partido Comunista en los años 20 y empezó las denominadas "purgas" contra antiguos aliados, en ocasiones componentes importantes del Partido, que ahora percibía como enemigos políticos y a los que mandó ejecutar o condenó a trabajos forzados en Siberia. Stalin no contento con ello, intentó reescribr la historia eliminándoles incluso de las fotografías. Los nuevos comunistas españoles eliminan directamente el tuit.

Las técnicas eran muy primitivas. Las fotografías se recortaban con un afilado escalpelo, y se disimulaba el corte con un aerógrafo, volviendose a fotografíar de nuevo la foto trucada. 

Fotografía original, Trotsky y Lenin celebran el segundo aniversario de la Revolución Rusa, 1919.

Fotografía trucada, tras la caída en desgracia de Trotsky, se elimina su figura.

Fotografía original, Stalin pasea a la orilla del canal Moscú-Volga. A su izquierda, Nikolai Yezhov.

Fotografía trucada. Tras la caída en desgracia y ejecución de Yezhov en 1940, su figura se elimina de nuevas distribuciones de la fotografía.

Orwell en su novela "1984" escribe "Quién controla el pasado controla el futuro. Quién controla el presente, controla el pasado". Y eso fue lo que intentó la extinta Unión Soviética, reescribir el pasado para controlarlo todo y a todos. Los nuevos comunistas ya no son lo que eran, aunque lo intentan. Querrían controlarlo todo y a todos pero  "los nuevos" no son tan listos. Los profesores y catedráticos que se arrimaron a PODEMOS están saliendo de estampida al comprobar lo que viene. No descarten ver a Urralburu eliminado del archivo fotográfico si los "pablistas" se hacen con el poder  en la región e inician "las purgas".