miércoles, 20 de marzo de 2019

SENTENCIAS COMO PICOTAZOS


Hola Mundo.

Hace unos días, la prensa española se hizo eco de un suceso ocurrido en una granja francesa. Unas gallinas habían matado a picotazos al zorro que se coló en su corral. La pelea fue desigual. Cuentan que el inexperto zorro, de unos siete meses de edad, no tuvo la más mínima oportunidad frente a 6000 gallinas con experiencia en lucha callejera porque viven en el exterior. Pues empieza a dar la impresión de que la justicia está asestando duros picotazos al zorro que se coló en el corral urbanístico, primero de la consejería de Obras Públicas y luego del Ayuntamiento de Murcia, solo que este zorro es más viejo y, por tanto, más experto.

SENDA DE GRANADA, ESPINARDO, La Verdad.


La Verdad


PUENTE TOCINOS, La Verdad.


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SUCINA, La Verdad.

EL RAAL, La Verdad.

ALJUCER, La Verdad



Todos y cada uno de esos planes parciales y modificaciones del plan general de ordenación urbana de Murcia tumbados por la justicia pasaron por las manos de Antonio Navarro Corchón durante su etapa como director general de Ordenación del Territorio de la consejería de Obras Públicas. Navarro Corchón, pese a los duros varapalos judiciales, sigue siendo concejal del Urbanismo y Huerta del Ayuntamiento de Murcia y paradójicamente es a quien el alcalde Ballesta ha encargado el Plan Huerta 2030 para recuperar espacios verdes que primero intentó enladrillar aprobando planes y reclasificaciones de suelo, en algunos casos de huerta protegida, sin informes preceptivos y obligatorios sobre disponibilidad de recursos hídricos de Confederación Hidrográfica del Segura, entre otras irregularidades.  El zorro puesto a guardar las gallinas como dicen en la huerta. No se sabe cuánto dinero lleva pagado el consistorio murciano en costas judiciales ni cuánto tendrá que pagar porque los tribunales de justicia aún deben dictaminar sobre una decena de planes parciales y reclasificaciones que también han sido recurridos por diferentes incumplimientos de la legislación hídrica, ambiental o de patrimonio cultural.

El Plan General de Ordenación Urbana que se aprobó en 2001 y se adaptó en 2005 contempla suelo urbano y urbanizable para dos millones de personas más y  la población actual del municipio no supera los 450.000 habitantes. Lo sensato sería revisar el planeamiento urbanístico y adaptarlo a la legislación actual y a las necesidades reales excluyendo  del mismo  los suelos de especial valor ambiental y paisajístico. Sería lo sensato y coherente ahora que el alcalde Ballesta va diciendo que quiere "aplicar a la huerta los objetivos de desarrollo sostenible de la Agenda 2030 de la ONU para recuperar este valioso legado histórico".  Pero no lo hará dada la magnitud de los intereses especulativos y económicos creados entorno al PGOU. Ya pueden llover sentencias judiciales como chuzos de punta. Al menos, Navarro Corchón ya no dice que las sentencias judiciales son "errores susbsanables" tomando por estúpida a la ciudadanía. Ahora se limita a manifestar que "acatará la sentencia" como no puede ser de otra manera en un Estado de Derecho, pero qué pena que los ciudadanos deban estar vigilando noche y día las ilegalidades e irregularidades de sus representantes como las gallinas vigilan su corral. Es tremendo.