miércoles, 19 de febrero de 2014

INQUIETANTES SIMILITUDES AEROPORTUARIAS





Hola Mundo.

Les voy a contar una cosa que igual les suena. 

La Comisión Europea ha ordenado a Polonia recuperar una ayuda pública ilegal de 21,8 millones de euros concedida al aeropuerto de Gdynia por considerar que esta subvención confiere a su beneficiario una ventaja económica indebida frente a sus rivales, en particular el aeropuerto de Gdansk a tan sólo 25 km de distancia
La investigación de Bruselas ha puesto de relieve que el aeropuerto de Gdansk ya comunica la región de manera eficaz y utiliza menos del 60% de su capacidad. Por ello, el Ejecutivo comunitario ha concluido que la ayuda para el aeropuerto de Gdynia no persigue un objetivo de interés común claramente definido, ya que éste no hace más que duplicar infraestructuras no rentables ya existentes sin ofrecer perspectivas económicas satisfactorias a medio plazo.

Según el informe de la Comisión, la subvención es por tanto incompatible con las reglas de la UE en materia de ayudas de Estado en el sector del transporte aéreo.

Desde el año 2.006 el aeródromo acoge una de las más grandes animaciones de música en Europa que es el Heineken Open'er Festival.

LAS 6 CLAVES DE LA DECISIÓN DE BRUSELAS

1º El plan que presentó Polonia se efectuó en un momento y sobre la base de una evolución previsible en que ya se había adoptado la decisión irrevocable del accionista público de financiar el proyecto de inversión.

2º La Comisión duda de que el tráfico y los ingresos previstos en el plan empresarial puedan alcanzarse teniendo en cuenta que sólo a 25 kilómetros se halla el aeropuerto de Gdansk, que no está saturado y que ya atiende la demanda de servicios de pasajeros de la región de Pomerania.

3º La Comisión tiene dudas sobre si la inversión de que se trata tiene un objetivo de interés común claramente definido, es necesaria y proporcional y tiene perspectivas satisfactorias a medio plazo sobre su uso.

4º Teniendo en cuenta el hecho de que la financiación está destinada a un aeropuerto que entrará en competencia directa con otro aeropuerto de la misma área de captación, la Comisión duda de que el desarrollo del comercio no se vea afectado de forma contraria al interés común.

5º La Comisión duda de si la financiación pública de las medidas en cuestión es necesaria, proporcional y tiene efecto incentivador.

6º No parece que la medida pueda optar a alguna de las otras excepciones previstas en el Tratado. Por ello, en la fase actual, la Comisión Europea no puede descartar que se trate de ayuda estatal ilegal e incompatible.

Comprobarán que hay inquietantes similitudes con la situación aeroportuaria de la Región de Murcia. Un aeropuerto "privado" en Corvera por abrir que pide ayudas públicas, a escasos 30 kms del aeropuerto público de San Javier que está al 50% de su capacidad y para el que, de momento, no hay planes de cierre para el tráfico civil.  

Por otra parte Bruselas todavía debe decidir sobre el préstamo participativo de 175 millones de euros que la anterior concesionaria del aeropuerto solicita para cubrir el déficit de caja durante los 10 primeros años.  Ese dinero, que la Comunidad Autónoma prestaría a un interés fijo y variable, se recuperaría entre los años 2024 y 2051. Según las cuentas del consejero Campos, la cantidad total a recuperar  dentro de 37 años sería de 195 millones de euros. 

Si Bruselas no accede a ese préstamo -primero tendrá que recibir la documentación requerida-  la Comunidad Autónoma anuncia que estudiaría otras ayudas públicas al turismo y al empleo. Ayudas que, como ha pasado en Polonia, podrían traer más disgustos de los que ya ha dado el aeropuerto de Corvera. Infraestructura, que, según el gobierno regional, la sociedad  reclama desde principios del siglo XX  pero que en pleno siglo  XXI es cuestionada por más de la mitad de los murcianos según el último barómetro realizado por el Seniors Club.

Sea como fuere. Los murcianos somos copropietarios de un aeropuerto en Corvera. Hemos pedido un préstamo de 182 millones que el consejero Bernal reclama a AEROMUR por "cielo, mar y tierra" al mismo tiempo que AEROMUR muestra el forro de sus bolsillos vacíos y recuerda que "sin contrato no hay dinero ni certificaciones aeroportuarias" porque los bancos no se fían.  

El lío del aeropuerto es tal que ya hay periodistas que proponen que lo abran al público como parque de atracciones.

Esperemos por el bien de todos los murcianos que el aeropuerto abra, funcione y sea rentable. Recuerdo las palabras de un destacado consejero "yo no habría construido el aeropuerto nunca, pero una vez que la cabeza ha pasado por la reja no hay marcha atrás. Sólo se puede ir hacia delante y que pase el cuerpo".