El
decano del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de
Andalucía, José
Abraham Carrascosa
se lamentaba recientemente de que esa comunidad vive instalada en el
bucle del gerundio: anunciando, prometiendo y reprogramando obras que
nunca se hacen porque dice: “nuestros políticos viven de anunciar
cosas que saben que no se van a hacer”. Murcia también ha padecido
y padece ese bucle infinito que nos ha impedido despegar. No es
cuestión de más aeropuertos aunque AENA ya tenga las llaves de
Corvera y el presidente López
Miras diga
que “con el aeropuerto internacional, la región Murcia despega
hacia el futuro” y que “gracias al AVE y el aeropuerto, Murcia
será una de las entradas a España de millones de turistas”. Una
euforia dialéctica que no comparten los directivos
de la región de Murcia -ADIMUR- que consideran más importantes
otras infraestructuras como el PHN/trasvases, el corredor
mediterráneo y el puerto de El Gorguel para el desarrollo de la
economía regional. El aeropuerto de Corvera lo sitúan en último
lugar.
Lo
cierto y verdad es que la Comunidad Autónoma (todos los murcianos)
hemos firmado con AENA un contrato cuya letra pequeña no conocemos
(inexplicablemente aún no está colgado en el portal de la
transparencia) por el que le cedemos la gestión y explotación del
aeropuerto de Corvera durante 25 años y cuya dirección ha encargado
a Mariano
Menor,
la misma persona que en su día contrató AEROMUR-Sacyr, empresa que
sigue litigando contra la Comunidad Autónoma en tribunales por la
liquidación del aeropuerto.
Un
aeropuerto de nombre Corvera y apellido “internacional” (aunque
no imagino aeropuerto más internacional que San Javier que solo
recibe extranjeros) de cuya rentabilidad no tiene ninguna duda el
ministro de Fomento Iñigo
de la Serna,
aunque en 2013 la propia AENA concluyó en un informe que “Corvera
no sería rentable aunque cerrase San Javier dado que la previsión
de pasajeros del nuevo aeropuerto es irreal porque se basó en el
boom urbanístico”. El aeropuerto de Corvera se planeó pensando en
la Paramount, Novo Carthago, Marina de Cope y Polaris, todos
proyectos fallidos de la era Valcárcel.
Un
aeropuerto que
en 2001 se justificó, según consta en el plan director, con el
argumento de que “en 2015 llegarían a Murcia 10 millones de
turistas, lo que implicaría para la región de Murcia la creación
de 23.000 puestos de trabajo y unos ingresos directos de 7.200
millones de euros”. En 2017, 996.000 turistas extranjeros visitaron
la región de Murcia según el INE. López
Miras dice
ahora que con el aeropuerto se duplicará el PIB turístico y
creceremos al 6,6% anual.
Plan director del aeropuerto de Corvera 2001 |
Se
trata del primer aeropuerto que va a gestionar AENA, en España, que
no es de titularidad estatal, a través de una empresa filial que ha
creado con un capital de 8,5 millones de euros. Le ha tocado pelar la
patata política que le ha encomendado Fomento. Y deberá pagar un
canon a la comunidad autónoma, pero solo a partir del millón de
pasajeros con lo que nadie sabe con exactitud cuándo recuperaremos
todo el dinero gastado en el aeropuerto que ronda ya los 300
millones de euros (entre préstamo, accesos y expropiados) ¡Y no nos
iba a costar ni un euro! decía Valcárcel.
La cuestión es que la apertura de Corvera, que el gobierno murciano
vende como un gran logro político, supondrá el cierre de un
aeropuerto público de titularidad estatal en San Javier que ha sido
premiado en dos ocasiones como el mejor de Europa en su categoría
(años 2014 y 2016), es operativo, funcional y rentable y no llega al
40% de su capacidad porque puede recibir hasta 3 millones de
pasajeros al año y cerró 2017 con 1,2 millones de pasajeros; y
serían muchos más si el gobierno regional hubiese apostado por él
y no lo hubiese boicoteado. Por ejemplo, carece de líneas de autobús
con Murcia y Cartagena de tal forma que los turistas se ven obligados
a ir a pie al pueblo más cercano o en taxi. En los folletos de FITUR
no aparece y desde el 3 de julio de 2008 que se puso la primera
piedra en Corvera, los rumores de cierre de San Javier han provocado
que varias aerolíneas dejen de operar todo el año en el aeropuerto
costero para hacerlo solo durante la temporada de verano y programar
su vuelos de invierno en el aeropuerto de Alicante.
Previsión de pasarejos en el aeropuerto de Corvera según el plan director elaborado en 2001 |
Los
aeropuertos de San Javier y Corvera, ambos de carácter
internacional, tienen prácticamente la misma capacidad (Corvera
anuncia en su web 3,5 millones de pasajeros) y, según AENA, tendrán
el mismo uso horario que San Javier (H-16): desde las 7.30 de la
mañana hasta las 22.30 de la noche. Todavía corre el bulo de que no
hay vuelos por las mañanas en San Javier por los militares. En
Corvera tampoco habrá vuelos a América como se ha llegado a
asegurar falsamente porque la pista no tiene la anchura necesaria
para los aviones de fuselaje ancho como los 747 (Jumbo) o el Airbus
340. La pista de Corvera es más larga (3.000 metros frente a 2.320
de San Javier) pero no más ancha. Miden lo mismo: 45 metros de
ancho; y para aviones de gran fuselaje se requiere de una pista de 60
metros de ancho como sí tienen Madrid y Barcelona. A priori, según
el presidente de AENA, Jaime
García Legaz,
tampoco habrá transporte de mercancías. ¿Incluyó
el pliego de condiciones del concurso del aeropuerto de forma expresa
“las posibilidades reales de uso de la terminal de carga” como
prometió en 2015 a PROEXPORT el entonces consejero de Fomento,
Francisco
Bernabé?
Me
atrevo a aventurar que no hay diferencias significativas ni ventajas
añadidas. Solamente la zona logística anexa que lleva al gobierno
regional a aventurar que se crearán 20.000 empleos, los mismos que
iba a crear la Paramount. Partiendo de la premisa de que no queda
otra que abrir Corvera, me pregunto si no estaremos desvistiendo un
santo rentable y funcional para vestir a otro del que todo es un
misterio. De la decena de compañías aéreas que en este momento
operan en San Javier, solo Ryanair ha aceptado trasladarse a Corvera.
Del resto nada se sabe. Confiemos en que el capricho aeronáutico de
Valcárcel
que tanto dinero público está costando prospere y se equivoquen
informes como el del Tribunal de Cuentas Europeo de 2014 sobre
aeropuertos financiados por la UE (la ampliación de San Javier
recibió 11 millones de fondos europeos) donde advirtió de que entre
Murcia y Alicante podrían darse “excesos de capacidad y poca
rentabilidad”. Si los informes europeos aciertan, habremos hecho un
pan como unas tortas.
Las dos circunferencias son los radios de influencia de las torres de control de las bases miliares de Alcantarilla y San Javier |
De
haberse planificado atendiendo solamente al interés general,
posiblemente habría sido más operativo y rentable un tren rápido
que hubiese enlazado la estación de Murcia con El Altet y haber
explotado al máximo las potencialidades del aeropuerto de San
Javier, que desde hace años no tiene restricciones militares de
ningún tipo. Pero como me dijo un destacado dirigente del PP
murciano: “la planificación de infraestructuras en esta región ha
sido y es un puto desastre”.
La
región de Murcia sufre el bucle del gerundio, aunque el consejero
Rivera
diga
que “ya se ha terminado el mantra de que la región es la eterna
olvidada de las infraestructuras”. Son incontables los ejemplos de
obras anunciadas, prometidas y reprogramadas en la región de Murcia,
solo que casi nadie se acuerda. Hace 13 años, en noviembre de 2005,
el BOE publicó la declaración ambiental de la variante ferroviaria
de Alcantarilla y Javalí Nuevo cuya publicación el ministro Iñigo
de la Serna
ha vuelto a anunciar porque la primera ha caducado como los yogures;
un anuncio que realizó durante su vista a Alcantarilla a principios
de febrero entre aplausos y lisonjas del gobierno regional y de la
clase empresarial murciana que mansamente dice a todo AMÉN. Hay más
ejemplos. En julio de 2006, el BOE publicó la contratación del
Estudio Informativo de la “Variante Noroeste de Murcia”. Pues el
pasado mes de diciembre, casi doce años después, el BOE publicó el
estudio de viabilidad del mismo arco/variante Noroeste tras la visita
de Rajoy
al salón de bodas, comuniones y bautizos de Tomás
Fuertes.
Hace doce años, en julio de 2006, el BOE anunció el estudio
informativo del Arco Norte de Murcia y hace diez años, en julio de
2008, publicó la adjudicación del proyecto de construcción del
tercer carril de la A-7 entre Orihuela-Monteagudo y
Alhama-Alcantarilla. En febrero de 2018, el BOE ha publicado el
estudio de viabilidad de todo ello (arco norte y tercer carril)
integrado y vuelta a empezar.
Se
están vendiendo como grandes logros, meros trámites administrativos
y tanto el BOE como el BORM están siendo los medios de propaganda.
El estudio informativo de la autovía Lorca-Caravaca se publicó en
2009. Ahí sigue. El estudio informativo de la autovía
Calasparra-Caravaca se publicó en 2008. Ahí sigue. En 2008 se
redactó el proyecto del enlace de la A-7 con la RM-3 en Totana con
un importe de 2,8 millones de euros que no se ha ejecutado porque
dice el consejero Rivera
que no hay dinero. Y claro, a falta de obras importantes que
inaugurar, ya anuncian en Twitter hasta el cambio de una señal de
tráfico.
La
región de Murcia no necesita de un aeropuerto nuevo para despegar
porque ya tiene el de San Javier acorde a las necesidades regionales.
Murcia está a la cola de España en inversión en infraestructuras
según un reciente informe de la asociación de empresarios
valencianos. Me pregunto a cuánto asciende el lucro económico
cesante de tanta desidia y cómo es posible que la clase empresarial
murciana haya sido tan bobalicona y complaciente y, lo más
lamentable, persista en ello. La anquilosada Cámara de Comercio de
Murcia recoge firmas a favor del Corredor Mediterráneo, pero no se
planta contra el estrangulamiento que supondrá que desde Callosa del
Segura el corredor ferroviario llegue a Murcia en vía única y no
en doble vía de ancho internacional. Por la misma vía quieren meter
mercancías, cercanías, AVE y media distancia y solo preocupa a los
valencianos que ven que el corredor de ahogará en Murcia dando alas
al corredor central. Tenemos lo que nos merecemos, pero Buzz
Lightyear
podrá despegar hacia el futuro desde Corvera. Confiemos en que no se
estampe y descubra que todo es un cuento y él un juguete en manos de
un niño.
Artículo publicaco en el peridódico La Opinión el sábado 3 de marzo de 2018.
CUÑA: Solo
concibo una manera de hacer periodismo y es desde la honradez para
evitar problemas de estómago. Nuestra misión como periodistas no es
adular a la clase gobernante, sino confrontarla con sus
contradicciones, cuestionar sus afirmaciones, aportar datos, revisar
documentos y contarlo de la mejor manera posible para que los
ciudadanos a los que se deben ellos y nos debemos nosotros, puedan
formarse una opinión documentada de la realidad; algo que,
lamentablemente, algunos se resisten a entender y aceptar.
Comprendiendo y entendiendo que todo gobierno, independientemente de
sus siglas, intentará vender como éxitos sus fracasos, no es menos
cierto que en nuestro país los periodistas aún tenemos licencia
constitucional para opinar y que nuestro oficio consiste en testar
los argumentarios políticos. Y sí, toda opinión es subjetiva solo
que unas lo son más que otras porque una opinión basada en datos
objetivos es menos cuestionable. La vida está llena de matices, los
hechos no.