Hola Mundo.
Hace
unos días, la prensa española se hizo eco de un suceso ocurrido en
una granja francesa. Unas gallinas habían matado a picotazos al
zorro que se coló en su corral. La pelea fue desigual. Cuentan que
el inexperto zorro, de unos siete meses de edad, no tuvo la más
mínima oportunidad frente a 6000 gallinas con experiencia en lucha
callejera porque viven en el exterior. Pues empieza a dar la
impresión de que la justicia está asestando duros picotazos al
zorro que se coló en el corral urbanístico, primero de la
consejería de Obras Públicas y luego del Ayuntamiento de Murcia,
solo que este zorro es más viejo y, por tanto, más experto.
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SENDA DE GRANADA, ESPINARDO, La Verdad. |
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La Verdad |
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PUENTE TOCINOS, La Verdad. |
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La Verdad. |
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SUCINA, La Verdad. |
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EL RAAL, La Verdad. |
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ALJUCER, La Verdad |
Todos
y cada uno de esos planes parciales y modificaciones del plan general
de ordenación urbana de Murcia tumbados por la justicia pasaron por las manos de Antonio
Navarro Corchón durante su etapa como director general de
Ordenación del Territorio de la consejería de Obras Públicas.
Navarro Corchón, pese a los duros varapalos judiciales, sigue
siendo concejal del Urbanismo y Huerta del Ayuntamiento de Murcia y
paradójicamente es a quien el alcalde Ballesta ha encargado
el Plan Huerta 2030 para recuperar espacios verdes que primero
intentó enladrillar aprobando planes y reclasificaciones de suelo,
en algunos casos de huerta protegida, sin informes preceptivos y
obligatorios sobre disponibilidad de recursos hídricos de
Confederación Hidrográfica del Segura, entre otras
irregularidades. El zorro puesto a guardar las gallinas como dicen en la huerta. No se sabe
cuánto dinero lleva pagado el consistorio murciano en costas
judiciales ni cuánto tendrá que pagar porque los tribunales de
justicia aún deben dictaminar sobre una decena de planes parciales y
reclasificaciones que también han sido recurridos por diferentes
incumplimientos de la legislación hídrica, ambiental o de patrimonio cultural.
El Plan General de Ordenación Urbana que se aprobó en 2001 y se adaptó en 2005 contempla suelo
urbano y urbanizable para dos millones de personas más y la
población actual del municipio no supera los 450.000 habitantes. Lo sensato
sería revisar el planeamiento urbanístico y adaptarlo a la legislación actual y a las
necesidades reales excluyendo del mismo los suelos de especial valor ambiental
y paisajístico. Sería lo sensato y coherente ahora que el alcalde Ballesta va diciendo que quiere "aplicar a la huerta los objetivos de desarrollo sostenible de la Agenda 2030 de la ONU para recuperar este valioso legado histórico". Pero no lo hará dada la magnitud de los intereses especulativos y económicos creados entorno al PGOU. Ya pueden llover sentencias judiciales como chuzos de punta. Al menos, Navarro Corchón ya no dice que las sentencias judiciales son "errores susbsanables" tomando por estúpida a la ciudadanía. Ahora se limita a manifestar que "acatará la sentencia" como no puede ser de otra manera en un Estado de Derecho, pero qué pena que los ciudadanos deban estar vigilando noche y día las ilegalidades e irregularidades de sus representantes como las gallinas vigilan su corral. Es tremendo.